El carbonato de litio Li2CO3

El carbonato de litio posee un punto de fusión muy alto, por lo que se usa en la preparación de vidrios, cerámicas y porcelanas. Tiene muy variados usos, como por ejemplo en baterías recargables de litio, en la preparación de otros compuestos de litio, en electrodos para soldar y en pinturas y barnices.

Uno de sus usos más importantes es en el tratamiento de algunas enfermedades mentales como la depresión y conductas excesivamente agresivas, entre otras afecciones.

Sin embargo, su utilización como medicamento debe ser debidamente controlada por especialistas médicos pues las personas tratadas con Li2CO3 pueden sufrir efectos dañinos para la salud, como por ejemplo hipotiroidismo (función reducida de la glándula tiroides).

Se usa como agente antidepresivo, antimaníaco, en el tratamiento de conductas agresivo-impulsivas y para desórdenes bipolares (personas que cambian de humor repentinamente sin causa alguna, llegando a ser violentas).

Los médicos han observado que su administración conduce a la disminución de la intensidad y frecuencia de los períodos severos de depresión y episodios maníacos.

Se emplea solo, es decir, sin ningún compuesto añadido, en la terapia de mantenimiento de la depresión unipolar y para el desorden esquizoafectivo. También sirve para aumentar el efecto antidepresivo de otros medicamentos.

Aunque ha sido usado para tratar niños con síntomas aparentes de desorden bipolar e hiperactividad con componentes neuróticos o de agresividad, no ha sido efectivo en todos los casos.

El Li2CO3 puede tener un efecto dañino sobre la tiroides y los riñones por lo que debe monitorearse la función de estos órganos antes y durante el tratamiento con este compuesto.

El Li2CO3 puede ser tóxico a concentraciones muy cercanas a las empleadas en los tratamientos médicos, por lo que se requiere una continua revisión de sus valores en suero sanguíneo.

Los síntomas de intoxicación con Li2CO3 son temblores, espasmos musculares, debilidad muscular, diarrea, vómitos, somnolencia o ataxia (deterioro en la coordinación muscular), entre otros.

Al iniciarse la terapia con Li2CO3 también pueden presentarse síntomas como por ejemplo temblores, dolores de cabeza y náuseas. Pero estos tienden a desaparecer al continuar la medicación.

La mayoría de las personas tratadas también puede desarrollar leucocitosis (aumento en el número de glóbulos blancos), pero esta es reversible.

Las personas que están siendo medicadas con Li2CO3 no deben manejar vehículos ni operar maquinarias, debido a que disminuye la coordinación física y la habilidad de realizar actividades que requieren estar alerta.

El carbonato de litio es uno de los medicamentos más antiguos para el tratamiento de la depresión, principalmente del trastorno bipolar. Es un medicamento de composición sencilla (carbonato de litio, es decir una molécula de la complejidad similar al bicarbonato de sodio que tomamos para la acidez) y cuya aplicación se encontró empíricamente hace muchos años.

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